Ordena Rubén Rocha “reventar” paro de la UAS. El plan es usar esquiroles
Álvaro Aragón Ayala
Encolerizado por el anuncio del paro de la Universidad Autónoma de Sinaloa decretado en defensa de la autonomía y en contra de la Ley Orgánica Externa y la persecución política y judicial enderezada contra los directivos universitarios, el gobernador Rubén Rocha Moya dispuso usar esquiroles, con botarga de universitarios, para tratar de impedir la protesta. Los grupos de choque, de acuerdo al plan rochista, realizarán manifestaciones en las calles y afueras de los planteles y edificios de la Casa Rosalina y repartirán volantes con el logo de la UAS rechazando el paro.
Se trata de una jugada desesperada, en cuya organización y desarrollo participan funcionarios del Gobierno de Sinaloa y diputados de Morena del Congreso Local y que tiene como objetivo “reventar” el paro universitario utilizando como “rompe huelgas”, con el disfraz de universitarios de la UAS, a estudiantes, profesores y directivos del COBAES, el Conalep, el Ictasin, las normales, la Universidad del Policía, la Universidad Autónoma Indígena de México, la Universidad Autónoma de Occidente, la Universidad Pedagógica, la Universidad Tecnológica, etcétera.
Rubén Rocha se enojó porque los directivos, el Consejo Universitario y la comunidad académica y administrativa rechazó la Ley Orgánica Externa de la UAS, elaborada por los diputados de Morena y sus aliados y publicada por él, el gobernador, violando la Constitución y la Ley General de Educación Superior ya que fue manufacturada al margen de la ley sin consultar a los auténticos universitarios y pasando por encima de los órganos colegiados de la Universidad. El mandatario estatal quiere aplicar “a huevo” la ley de marras.
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En su obsesión por tomar el control de la UAS, el gobernador ordenó crear, primero, la Ley Estatal de Educación Superior, que fue declarada inconstitucional por un Juez Federal por violar la autonomía de la Casa Rosalina. Luego mandó fabricar la Ley Orgánica Externa desacatando un amparo federal que le prohíbe al Congreso Local, a la SEPyC y al gobierno del Estado realizar consultas para reformar la Ley Orgánica, facultad que le corresponde únicamente a la comunidad universitaria.
Los diputados de Morena quebrantando el amparo y atentando contra disposiciones Constitucionales y de la Ley General de Educación Superior celebraron “por sus pistolas” una consulta en las afueras del campus, a la cual acarrearon, para que votaran o para que externarán su opinión sobre la reforma, a estudiantes, profesores y directivos de otras universidades y escuelas preparatorias. Pese al acarreo sólo se cruzaron mil 700 boletas. La UAS posee una estructura de alrededor de 200 mil universitarios que no se consultaron.
Una vez publicada la Ley Orgánica Externa en el Diario Oficial del Estado, la UAS la rechazó. El gobierno de Rubén Rocha ajustó a la Fiscalía y a los Jueces Locales para que busquen la manera de meter a la cárcel a los directivos de la UAS para que no impugnen o se amparen contra la Ley. Pero no han podido cumplir con la consigna. Por acuerdo de su Consejo Universitario, la Casa Rosalina dispuso irse al paro de labores, desencadenando la locura del mandatario estatal.
El gobernador giró instrucciones para que organizaran “manifestaciones externas” rechazando el paro universitario, para lo cual movilizarán a personal directivo, académico y administrativo de Universidades y planteles de educación media superior en donde él quita y pone directivos. Los contingentes serán disfrazados de universitarios de la UAS para aparentar que son los uaseños quienes se oponen al paro de labores. Los esquiroles son reclutados por rectores, directores, dirigentes de Morena y por los diputados locales guindas.
La suplantación de la identidad de los universitarios en activo, legítimos, para demostrar una supuesta inconformidad contra la UAS y sus directivos es una estrategia que ya fue usada por Rocha Moya. El 16 de julio, transportó a la Ciudad de México a miembros del COBAES, el Conalep, el Ictasin, las normales, la Universidad del Policía, la Universidad Autónoma Indígena de México, la Universidad Autónoma de Occidente, la Universidad Pedagógica, la Universidad Tecnológica, etcétera., para gritar consignas en El Zócalo contra las autoridades y la comunidad uaseña que realizaba una protesta pacífica exigiendo freno a los atentados y a la persecución política y judicial.