Las señales detrás de la designación del nuevo embajador de EU en México
Arturo Sarukhán
Hoy, Arturo Sarukhán analiza en su videocolumna el anuncio de Donald Trump sobre la nominación de Ron Johnson, coronel en retiro con una sólida carrera militar en Latinoamérica y amplia experiencia en la CIA, como embajador de Estados Unidos en México, y que destaca por su enfoque en temas de seguridad nacional y su fluidez en español, lo que refuerza la prioridad de la seguridad fronteriza en la relación bilateral.
El analista subraya que, aunque Johnson no es una figura cercana a Trump, su perfil se ajusta a las prioridades del mandatario, como el combate al crimen organizado y la lucha contra el narcotráfico; además, destaca que su relación con figuras clave del Departamento de Estado, como el senador Marco Rubio y el asesor de Seguridad Nacional, Mike Waltz, sugiere que el nombramiento responde más a una estrategia de poder en Florida que a una cercanía ideológica con Trump, lo que podría influir en la forma en que se manejen las relaciones con México en el futuro.
El nombramiento de Johnson, afirma Sarukhán, también plantea desafíos diplomáticos, ya que, a diferencia de embajadores anteriores, no contará con la capacidad de contactar directamente al presidente de Estados Unidos, una prerrogativa que sí tuvieron figuras como Antonio Garza o Carlos Salazar; el analista señala también que se espera que, a partir del 20 de enero, Johnson deba obtener el beneplácito de México antes de que su nombramiento sea confirmado, lo que implicaría que asumiría como embajador hacia la primavera o verano de 2025.
Con información de Latinus