Germán Martínez, el gran impostor, un traidor de la 4T

Miguel Badillo

El presidente no toleró más y habló de algunos que lo han traicionado a él, a su gobierno y al proyecto transformador que encabeza, llamado 4T. Se trata de personas en quienes en confió para darles cargos en su gabinete, y otros a quienes apoyo para que el partido Morena los propusiera en exitosas fórmulas electorales para ocupar espacios en el Senado de la República.

En su conferencia matutina del miércoles anterior (7 de diciembre 2022), el mandatario habló de que fue un error apoyar a Lilly Téllez para que llegara al Senado de la República, con el voto de simpatizantes de Morena, y lo mismo acusó de traición al expanista Germán Martínez, a quien promovió primero para ser senador y después lo designó director general del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), de donde tuvo que renunciar cuando le impidieron manejar a su antojo las finanzas, principalmente el presupuesto destinado a la compra de medicinas y equipos para la salud de los mexicanos.

En su corta gestión al frente del IMSS, Martínez Cázares se dio tiempo entre enero y abril de 2019, para destinar 1 mil 314 millones de pesos a contratos de subrogación del IMSS para financiar 24 guarderías privadas, sólo en la Ciudad de México, mismas que por órdenes presidenciales dejaron de recibir recursos públicos. El 80 por ciento de ese gasto era destinado sólo al pago de servicios.

El presidente Andrés Manuel López Obrador reconoció que en política “se cometen errores, muchos. No hay quien diga que no comete errores, pero también no tiene uno por qué sentirse mal, porque uno actúa de buena fe”, y comentó sobre Lilly Téllez: “triunfa la señora y, sin hacerle nada, nada, se vuelve mi adversaria más furibunda, que es la que dice que si ella llega a ser presidenta me va a meter a la cárcel”.

El primer mandatario aclaró que no sólo se ha equivocado con la señora Téllez, también le pasó con el expanista Germán Martínez Cázares, amigo y cómplice de Felipe Calderón cuando éste se robó la Presidencia de la República -recordamos todavía su “haiga sido como haiga sido”- y a quien nombró secretario de la Función Pública en aquel sexenio panista en donde todos los días se practicaba la corrupción en todas las áreas de gobierno, sin que nadie pisara la cárcel porque Martínez Cázares fue negligente y omiso. Con esos antecedentes, cómo esperaba el presidente López Orador que no lo traicionara y que al frente del IMSS pudiera tuviera una buena gestión.

“El caso de Germán Martínez creo es una gente inteligente, abogado, alumno de uno de los fundadores del PAN, de los ideólogos del PAN, Carlos Castillo Peraza, así, del corte de Calderón, pero ya llegué a la conclusión de que están hechos en serie, son iguales. Entonces, también sin hacerle nada, al contrario, se le dio la oportunidad de participar como senador, para candidato a senador, y luego yo necesitaba una gente buena para el Seguro Social. ¿Imagínense?.

“Pero esto es parte del noble oficio de la política. Lo importante es no amargarse, no odiar, entender que es la condición humana y que en política suele pasar, no es siempre así, pero suele pasar que los amigos son de mentira y los enemigos de verdad”, dijo melancólico López Obrador.

Por eso, comentó, “cuando se habla de lealtad hay que ver eso con reserva. Lo mejor, lo mejor, lo mejor, es la lealtad al proyecto, a los ideales, no la lealtad a los hombres, a las mujeres, porque eso es muy relativo. De repente, ya una gente cercana, no es este caso, hay casos de gente mucho, mucho, mucho muy cercana y formados en causas populares, revolucionarias y hay traiciones siempre, pero no por eso desanimarse, sentirse tristes, no, lo importante no traicionarse a uno mismo, y lo importante es el tribunal de nuestra conciencia y no odiar, y recordar de que sólo siendo buenos podemos ser felices”.
Aunque no lo mencionó, el presidente tendría que agregar a su lista de traidores a los dos exsecretarios de Hacienda del gobierno actual: Carlos Urzúa y Arturo Herrera, a quienes López Obrador les pidió su renuncia porque andaban con prácticas neoliberales, querían endeudar al país y gastaban más de lo autorizado, sin descontar que mediaban y negociaban con bancos para beneficiar a empresas privadas y a gobiernos estatales de oposición.

¿Quién es el traidor panista Germán Martínez?

Antes de que Germán Martínez presentara su renuncia al IMSS, el 21 de mayo de 2019, cuando apenas llevaba unos meses al frente de dicho instituto, tiempo suficiente para darse cuenta de que la Oficialía Mayor de la Secretaría de Hacienda jamás le daría ni un quinto para que él comprara las medicinas y equipos a sus amigos de los cárteles de la salud que operan en México, porque el proyecto gubernamental era hacer compras consolidadas para todo el sector salud, el político panista que había logrado engañar al presidente e infiltrarse a la 4T, instrumentó un perverso plan para vengarse de los funcionarios que le habían impedido meter las manos en el presupuesto público. 

Acostumbrado a que en los gobiernos panistas de Vicente Fox y Felipe Calderón se podía gastar sin escrúpulo ni medida los recursos del erario, Martínez Cázares se quejaba públicamente de la austeridad ordenada por su jefe López Obrador y pretendía que le abrieran el presupuesto para poder firmar contratos de bienes y servicios con proveedores previamente seleccionados, lo que era contrario a las nuevas políticas de gobierno en cuanto a gasto se refiere. 

Fue así que 4 días antes de entregar aquella carta-renuncia en 2019, en donde se quejaba amargamente de la administración del IMSS y de la injerencia de la Oficialía Mayor de Hacienda, Martínez Cázares presentó denuncias penales ante la Fiscalía General de la República, la Secretaría de la Función Pública (SFP) y la Auditoría Superior de la Federación (ASF) por presuntas irregularidades cometidas supuestamente por el director de Administración del IMSS, doctor Flavio Cienfuegos Valencia, porque según el denunciante causó graves daños patrimoniales. 

Germán Martínez fue creado en la cuna de la corrupción calderonista, baste recordar en cuyo gobierno ocupó la titularidad de la SFP, en un periodo caracterizado por los abusos de poder, tráfico de influencias desvío de recursos públicos y, lo peor, en donde el entonces secretario de Seguridad Pública, Genaro García Luna, protegía a bandas del narcotráfico sin que el secretario de Función Pública hiciera algo al respecto.

De todas esas acusaciones que el ahora senador independiente presentó hace tres años, nada se sabe y él mismo guarda silencio al respecto. 

Acusación penal contra Martínez Cázares

También el senador Martínez Cázares tiene denuncias penales en su contra. Su nombre aparece en la carpeta de investigación FECC/FECC//FECC-CDMX/0000776/2020, al lado de los imputados Roberto Gil Zuarth, Luis Fernando Salazar y Jorge Luis Lavalle –este último preso por el caso de los sobornos de Odebrecht a exlegisladores–, abierta en la Fiscalía Especializada en Combate a la Corrupción. 

De estos políticos panistas se revisa su situación financiera, fiscal, bancaria y propiedades como bienes inmuebles. Allí se detalla la constitución y operación del despacho Accuracy, el cual recibe recursos millonarios a través de un esquema que la Unidad de Inteligencia Financiera considera ilegal por haber una “triangulación entre empresas”, incluidas factureras.

Se trata de tres denuncias por enriquecimiento ilícito y fraude fiscal presentadas ante la Fiscalía Especializada en Combate a la Corrupción (FECC) –la última recibida el 19 de enero de 2022– y otra más en la Procuraduría Fiscal de la Federación.