Ley sobre registros civiles da a Segob datos biométricos y pone en riesgo la privacidad
Luz Rangel
Una nueva ley —que próximamente discutirá el Senado— haría obligatorio dar a la Secretaría de Gobernación (Segob) tus datos biométricos al registrar actos en el Registro Civil (nacimientos, adopciones, matrimonios, divorcios, defunciones), lo que a decir de especialistas pone en riesgo derechos humanos esenciales como la privacidad y la protección de datos personales.
Los datos biométricos se caracterizan por ser universales, ya que todas las personas cuentan con ellos; además, son únicos y permanentes. Esta nueva ley, aprobada la semana pasada por la Cámara de Diputados, implica concentrar esos datos en la Segob sin justificación clara o especificación, y sin que se expliquen cuáles serían los mecanismos de protección para que no se filtren o sean sustraídos con ataques cibernéticos.
La propuesta fue realizada por la legisladora Erika Vanessa del Castillo, de Morena, e incluso respaldada en la Cámara de Diputados por otros partidos políticos; el dictamen obtuvo 311 votos a favor y 131 en contra, principalmente de panistas y de Movimiento Ciudadano. El siguiente paso es que senadoras y senadores analicen el dictamen.
“Llamamos al Senado a que no se apruebe en estos términos y que, al menos, se retire que se recolecten obligatoriamente los datos biométricos”, dijo al respecto Grecia Macías, abogada de la Red en Defensa de los Derechos Digitales (R3D).
Registrar actos civiles con datos biométricos
La Ley General de Operación de los Registros Civiles establece un formato único, expedido por la Segob, de inscripción de actos del estado civil de las personas. Por ejemplo, nacimientos, adopciones, matrimonios, divorcios, defunciones.
El artículo 36 enlista datos mínimos que cualquier inscripción en los Libros del Registro Civil deberá tener, ya sean administrativos o de identidad. Entre estos últimos se encuentran los nombres, apellidos, sexo y género, lugar y fecha de nacimiento, nacionalidad y Clave Única de Registro de Población (CURP).
Pero también se encontrarían “datos biométricos en los términos que establezca la Ley General de Población, conforme al procedimiento y disposiciones que establezca la Secretaría”.
La organización R3D señaló al respecto que no debería condicionarse la inscripción de actos en el registro civil a la entrega de datos biométricos.
“No te dan ninguna otra alternativa si tú quieres registrar un acto en el registro civil”, criticó la abogada Grecia Macías.
Como antecedente, en 2022 la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) invalidó el sistema normativo que creaba el Padrón Nacional de Usuarios de Telefonía Móvil (Panaut), justamente porque obligaba a los usuarios a otorgar sus datos biométricos. La acción de inconstitucionalidad 82/2021 estableció que como los datos biométricos permiten identificar a las personas de manera unívoca, proporcionarlos de manera obligada viola el derecho a la intimidad.
Los promoventes de esta nueva ley aseguran que garantiza el derecho a la identidad. Sin embargo la SCJN consideró en su momento que el que diferentes actores tengan acceso a los datos biométricos abre la puerta a conductas ilegítimas que terminan en un robo de identidad, lo que debilita este derecho.
¿Qué son los datos biométricos y qué implica que los administre la Segob?
“Los datos biométricos son todos aquellos que son obtenidos a través de un tratamiento tecnológico y que revelan las características fisiológicas, físicas, de comportamiento relacionadas a una persona”, añade la egresada de la Facultad de Derecho de la Universidad Panamericana.
De acuerdo con la Guía para el tratamiento de datos biométricos del Instituto Nacional de Transparencia, Acceso a la Información y Protección de Datos Personales (INAI), entre los que se refieren a características físicas y fisiológicas se encuentran la huella digital, el reconocimiento facial, la retina, el iris, la geometría de la mano o de los dedos, la estructura de las venas de la mano, la forma de las orejas, la piel, el ADN, la composición química del olor corporal, la pulsación cardíaca, entre otros.
Respecto del comportamiento, algunos son la firma autógrafa, la escritura, la voz, la forma de oprimir un teclado y la forma de caminar.
“La combinación de datos biométricos te pone en una situación en la que la persona que los tiene te puede estar vigilando sin tu consentimiento, sin que siquiera lo sepas. Precisamente como están íntimamente relacionados con el cuerpo de las personas, eso les da la categoría de sensibles”, expresa Macías.
Omar Enrique Castañeda González, diputado de Movimiento Ciudadano, alertó en la sesión ordinaria del martes 14 de marzo de 2023 que la ley no aclara qué datos biométricos solicitaría la Segob.
“No se específica en esta propuesta cuáles son estos datos biométricos y es muy peligroso dejarlo abierto, porque estaríamos hablando de datos que pudieran usarse en sistemas electrónicos que podrían vulnerar la privacidad”, dijo el legislador.
La abogada Grecia Macías cuestiona por qué y para qué la Segob necesita estos datos biométricos, ya que la ley no lo explica. En esto coincidió otro diputado de MC, Braulio López Ochoa Mijares.
“La iniciativa no justifica de forma alguna el uso de los datos biométricos ni los fines de contar con los mismos. Tampoco señala cuáles datos biométricos serían usados y sí establece que será la Secretaría de Gobernación quien emita los lineamientos correspondientes, lo que eso quiera decir. Esto elimina certeza sobre el uso, fin y protección de los mismos”, mencionó el legislador.
Riesgo de vulneración
El capítulo II de la Ley General de Operación de los Registros Civiles habla de un Sistema Nacional de Registro e Identidad (SID), es decir, una herramienta informática administrada por la Segob.
“La Secretaría establecerá los mecanismos y requisitos para que las dependencias y entidades del sector público, sector privado y sector financiero, puedan consultar y validar electrónicamente la información y los registros de los datos contenidos en el SID”, dice el artículo 46 de la ley.
Para Grecia Macías, el SID implica centralizar los datos biométricos y transferirlos a terceros, ya sean entidades públicas, privadas y financieras, sin establecer su manejo. Esto podría ocasionar que agentes maliciosos terminen vulnerándolo para obtener esa información.
“Se pretende concentrar la información de los datos personales que se recaben en las actas del Registro Civil, incluyendo datos biométricos, sin que se acoten en el cuerpo de la legislación medidas de protección de la información que podría ser susceptible de ser sustraída, en especial, por el universo de personas que tendrían acceso”, criticó la diputada panista María Elena Pérez-Jaén Zermeño, excomisionada del órgano de transparencia del entonces Distrito Federal (InfoDF, hoy InfoCDMX).
Por ello, de acuerdo con legisladores de oposición, esta ley violaría derechos esenciales como la privacidad y la protección de datos personales, tanto en el plano material como en el digital.
“Abre la puerta para que la Secretaría de Gobernación pueda concentrar y vincular los datos biométricos de las personas registradas, un tema que atenta contra la seguridad de las personas”, aseguró la diputada panista Lizbeth Mata Lozano.