La ruta al Senado: Paloma aún no vuela. Estrada, perseguido; Enrique, el acosador, y las comparsas
Álvaro Aragón Ayala
Con la injerencia directa en el proceso electoral de Rubén Rocha Moya acusado por miles de universitarios de traidor y persecutor, el viernes arrancan las campañas al Senado de la República con candidatos que buscarán, unos, meter al poder legislativo federal a un acosador sexual, otros que tratarán de reventar el proyecto rochista y otros más que participarán en la contienda conscientes que serán comparsas del gobernador y Morena que están zambutidos en un escenario de repudio social.
Deteriorado, con una imagen que se revuelca en los lodazales de la política, el gobernador intentará con todos los medios a su alcance aplastar a quien él declaró su acérrimo enemigo, Jesús Estrada Ferreiro, ex alcalde de Culiacán que aparece en la fórmula del Partido del Trabajo al Senado de la República, junto con Yolanda de la Cruz. Estrada tiene posibilidades de crecer y de capitalizar la inconformidad que gira en torno a la clase política de Morena y del gobernador Rubén Rocha Moya, cuya radiografía política lo pinta como un represor.
Rocha Moya moverá a Imelda Castro Castro y a Enrique Inzunza Cázarez, postulados por él y Morena, por un Sinaloa sumido en la ingobernabilidad: los asesinatos, los desaparecidos, los “levantados”, los robos de vehículos, etcétera, han subido exponencialmente. El gobierno rochista le falló a los productores agrícolas, ganaderos, mineros, pescadores y acuicultores y empresarios, e impuso la “política” del garrote y la persecución. Hay hambre en Sinaloa y sed de justicia.
En el escenario ya aparecieron las encuestas pagadas y los seudo análisis periodísticos que distorsionan la realidad social, económico y político para difundir que la administración fallida de Rubén Rocha Moya es un “gobierno perfecto” cuando la realidad es que camina rumbo al estado de la barbarie, en el que no funciona la estructura de seguridad y prevención del delito y el mandatario amenaza, acosa, insulta, criminaliza y persigue a los críticos y opositores del régimen estatal.
El gobernador ha girado la indicación para que sus “analistas” políticos diseminados en los medios de comunicación, oculten la demanda de acoso, hostigamiento sexual y amenazas que obra contra Enrique Inzunza y dictó la orden también de no tratar el tema donde se le ve en un video masturbándose, y exigió que se resalte que Jesús Estrada Ferreiro está involucrado en procesos judiciales por Ejercicio Indebido del Servicio Público, Abuso de Autoridad y Discriminación.
Por la ruta del apoyo a Imelda Castro Castro juegan el papel de comparsas los candidatos al Senado por el Partido Verde Ecologista de México, Jesús Valdez Palazuelos, apodado el “Miky Way”, y Nubia Ramos, que en función de alcaldesa dejó tronado el ayuntamiento de El Fuerte. La fórmula verde intentará arrebatar votos al Partido Revolucionario Institucional. Otra “extra” rochista lo es Fernanda Rivera Romo que desde el Movimiento Ciudadano también tratará también de arrancar sufragios al PRI.
Con el diagnóstico del estado infernal y de la pésima administración rochista y coordinada por Bernardino Antelo Esper, Paloma Sánchez Ramos, arrancará también su campaña por el Senado de la República al lado de Eduardo Ortiz. Los abanderados de la alianza opositora contarán con el respaldo del Partido Sinaloense, considerado toda una potencia electoral. A los dos, Rubén Rocha los quiere desaparecer del mapa político y aunque no se saben cómo ni cuándo, los priistas, panistas, perredistas y pasistas esperan que Paloma levante el vuelo antes de ser desplumada.