¿Más mañaneras?
Leopoldo Mendívil
Doctora Sheinbaum, si ya decidió continuar con la mañaneras, aproveche el espacio para medio convencer a ese 38% de los electores que no votó por usted
DRA. CLAUDIA SHEINBAUM,
PRÓXIMA PRESIDENTA DE MÉXICO:
El éxito de una marca es la
autodefinición, la transparencia
y la rendición de cuentas.
Sino Mainwaring
¿Es en serio que va a continuar con las mañaneras? No me lo puedo creer.
Pese a mis muy numerosas discrepancias con el presidente López Obrador, reconozco que ha tenido una gran habilidad para, a través de las mañaneras, establecer una narrativa para la 4T, llena de soundbytes de gran impacto. Para sobrevivir haberse presentado en una mañanera, de dos horas, cinco días de la semana, durante seis años, se necesitan características -no cualidades- que usted parece no tener, lo cual celebro y me explico por qué.
La mañanera no es un ejercicio de comunicación circular como a AMLO le gusta presumir; es un acto de propaganda política a costa de los recursos públicos y con muchas deficiencias en términos de rendición de cuentas.
La narrativa del inquilino de Palacio Nacional está basada en la posverdad, en hacer oficial una realidad distorsionada para ajustarla a sus intereses políticos, lo cual es una falta de ética en la gestión pública y un engaño para los ciudadanos. ¿Está usted dispuesta a continuar mintiendo, expresando medias verdades o haciendo promesas no verificables? Se necesita tener la cara muy dura…
Le pongo algunos ejemplos. ¿Cuántas veces ha sacado el presidente su pañuelo blanco en señal de que “ya se acabó la corrupción”? ¿Cuántas veces ha dicho que tendremos “servicios de salud como en Dinamarca”? ¿Cuántas veces ha expresado “lo estamos resolviendo”? Evidentemente, lo que dice dista mucho de ser cierto, pero el presidente parece pensar que porque él lo dijo ya se convirtió en realidad. No me extraña que lo siga haciendo, porque le ha funcionado con sus seguidores, quienes más se asemejan a miembros acríticos de una secta que a simpatizantes políticos. Pero esos son los pejelovers y dudo que en automático se conviertan en claudialovers.
Otro rasgo de don Andrés es el grueso teflón que le recubre, pues cuando lo cachan en alguna falacia, rebota la denuncia como misil en contra del medio que la difundió. Ya sabe: chayoteros, conservadores, etc. Así que la pregunta sería: ¿está usted dispuesta a seguir peleando con los medios de comunicación?
Y hablando de los medios, doctora Sheinbaum, valdría la pena que pusiera atención a la concurrencia de las mañaneras. Jesús Ramírez Cuevas, el todavía coordinador de Comunicación de Presidencia, dio una preferencia superlativa a medios muy pequeños cuyas audiencias son muy dudosas, pero hacen preguntas a modo, dejando discriminatoriamente de lado a los demás.
Con dos agravantes, doña Claudia: Primero, la evidente siembra de preguntas ha ido en detrimento de la credibilidad de la mañanera; segundo, en otras ocasiones estos medios pequeños hicieron de la conferencia una ventanilla de atención ciudadana. Una participación equilibrada de los asistentes sería de agradecer.
Ahora bien, si usted pretende que su mañanera sea una verdadera conferencia de prensa, pues tómese algunas precauciones. Las conferencias son para establecer la agenda de discusión, objetivo que el presidente logró en el 6% de las veces (Spin Taller de Comunicación). Más que establecer el tema de la agenda, el presidente estableció el tema del pleito del día contra el adversario elegido y dicho pleito “mataba” cualquier información interesante que él y/o algún secretario presentara. Así, se hablaba continuamente del presidente, pero no de los éxitos de su gestión, si es que hubo alguno.
Así pues, asumiendo que usted no tiene la intención de seguir peleándose con la mitad del país y que sí desea informar, le sugiero circunscribirse a un tema por conferencia y presentarlo con datos duros verificables. Aquí es donde usted tendrá una oportunidad valiosa para dar a su gestión un tinte personal pues, por un lado, podrá ofrecer solidez a cambio de la falta de carisma lopezobradorista; o sea, más contenido, menos choro mareador.
Por otro lado, y si permite que los secretarios sean quienes “se lleven la nota”, demostrará que no están de floreros y que se trata de una administración de equipo. Si algún secretario mete la pata, el costo del error será para él y no para usted, cuyo teflón se antoja más bien delgado.
Hay otro elemento a considerar: Si el presidente es tan popular es porque ha sabido vender muy bien sus intenciones, no los resultados de su gestión. Me temo que el período de promesas de la transformación ya se acabó, incluso entre algunos cuatroteístas. A usted le tocará dar resultados.
En fin, doctora Sheinbaum, si ya decidió continuar con la mañaneras, aproveche el espacio para medio convencer a ese 38% de los electores que no votó por usted.
No son pocos millones de ciudadanos.
P.D. Tricolor: De pena ajena la reelección de Alejandro Moreno en la dirigencia del PRI y la expulsión de Manlio Fabio Beltrones como miembro de la bancada senatorial de dicho partido. Iré sacando mi corbata negra de los entierros.
Con información de López Dóriga Digital