¿Un robo comunista? No, cobrar impuestos a herencias ayudaría contra la desigualdad, explican especialistas

Frasua Esquerra

¿Morena quiere cobrar a la gente por morirse?  Es lo que reclamaron legisladores de oposición en la Ciudad de México por una iniciativa que plantea cobrar un impuesto a las herencias. Sin embargo, especialistas consultados mencionan que esa medida puede ser un “mecanismo de justicia fiscal”, ante la desigualdad que prevalece en el país. 

La discusión sobre el tema se reactivó por una propuesta legislativa del diputado local Gabriel Varela, del Partido Verde. Inicialmente, planteó poner un impuesto a las herencias a partir de los 15 millones de pesos, aunque luego dijo a medios que había cometido un error, que su propuesta en realidad es gravar herencias a partir de los 1,500 millones.

“Fue un error… la cantidad de 15 millones fue un error, es de 1,500 millones lo que se está proponiendo. Ya envié la aclaración a la Comisión de Hacienda para que eso sea lo que se discuta”, mencionó.

Con esta actualización, el impuesto afectaría únicamente al grupo de los llamados ultrarricos, un grupo al que pertenece poco más de una decena de personas en México, entre ellos Ricardo Salinas Pliego, dueño de Televisión Azteca, quien se manifestó en contra de la iniciativa. 

La propuesta original buscaba que las herencias de entre 15 y 60 millones de pesos pagaran un 10% de impuesto; las que van de los 60 a los 15 millones, un 20%, y un 30% a aquellas superiores a los 150 millones. 

El piso de 15 millones que se había planteado originalmente era incluso mayor que el umbral propuesto por organizaciones como Fundar, que sugiere un cobro a las herencias a partir de los 8 millones de pesos, con lo que se afectaría solamente al 1% de la población con mayores recursos en el país.

“Ese es el punto”, comentó la directora ejecutiva del Centro de Investigación Económica y Presupuestaria (CIEP), Alejandra Macías. “Que las personas que están concentrando la riqueza, que es el 1%, pues que paguen más”, apuntó. 

Se tiene una tasa nominal del impuesto sobre la renta del 35% a personas físicas. “Eso quiere decir que a los trabajadores asalariados le quitan 35%, ¿por qué una herencia no pagaría el 30%?”.

Andrea Larios, investigadora de Justicia Fiscal en Fundar, coincidió en que “es algo necesario”, ya que “uno de los mecanismos reproductores de la desigualdad que más pesan es precisamente la transmisión intergeneracional de la desigualdad, que se da a partir de las herencias multimillonarias”.

Poner un impuesto a esta transmisión de riqueza o herencias, agregó, “puede actuar como un mecanismo de justicia fiscal, pero también de justicia económica y justicia de género porque limita de cierta manera la reproducción de estas desigualdades”. 

Son ideas “comunistas”, reclamaron legisladores panistas 

El diputado panista Diego Garrido calificó de comunistas a quienes proponen la medida, ya que a su parecer “castiga el trabajo de toda una vida y debilita el legado que queremos dejarle a nuestros hijos”.

“Nos parece lamentable esa idea, que tengan estas ideas comunistas de quitarle a la gente dinero, parece que hay una urgencia de estar recabando dinero por lo que sea”, comentó a Televisión Azteca el legislador panista Federico Chávez.

En el noticiero estelar de dicha televisora se afirmó que “la propiedad privada en México está en la mira de oscuros personajes de Morena y del Verde también que quieren hincar el diente en el patrimonio de la gente”, y que “contar con un patrimonio de 15 millones de pesos no te hace necesariamente acaudalado”.

Sin embargo, según un estudio elaborado por la organización Oxfam, en México apenas 293 mil 980 personas —apenas el 0.22% de la población— poseen fortunas superiores al millón de dólares, equivalente hoy a 20 millones de pesos.

De hecho, en nuestro país el 1% más rico de la población acumula el 34.1% de la riqueza, según el estudio El caso de la exención a las herencias multimillonarias, elaborado por Fundar en 2021.

Por otra parte, dentro de los países que forman parte de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), México es el país que menos impuestos obtiene como porcentaje de su Producto Interno Bruto. 

Sin embargo, la bancada de Morena en el Congreso federal rechazó la propuesta del diputado local. El coordinador legislativo, Ricardo Monreal aseguró que ni en la Cámara de Diputados ni en el Gobierno federal hay interés en impulsar un gravamen de este tipo.

“No hay un ánimo legislativo para gravar grandes riquezas o herencias. Creo que es un tema delicado, pues muchas personas temen que sus propiedades, su casa, su carro o sus pequeños ahorros puedan verse afectados por una reforma así”, explicó Monreal.

“Siempre hay que tener mucho cuidado con estas medidas, socializarlas bien, darlas a conocer a la población y que la ciudadanía opine al respecto”, añadió el legislador.

La medida se aplica en otros países y ayuda a redistribuir la riqueza

Cobrar un impuesto a las herencias o al patrimonio heredado no es algo extraño, pues muchos otros países llevan años implementando esta medida. 

Corea del Sur, Bélgica, Francia y Japón tasan las herencias y tienen los porcentajes más altos de este impuesto como porcentaje de su PIB.

En su iniciativa, el diputado Varela López argumentó que México tiene un nivel bajísimo en el cobro de impuestos y que los súper ricos en México han visto crecer sus fortunas en un tercio desde el inicio de la pandemia, mientras que el 50% más pobre apenas ha recibido 0.40 pesos por cada 100 pesos de riqueza creada. 

De ser aprobada, la iniciativa sólo se aplicaría en la Ciudad de México. En este sentido, Alejandra Macías menciona que para “hacer un sistema fiscal más más justo” sería una idea replicar la propuesta para el resto del país.

Aunque cobrar un impuesto a las herencias “está muy bien”, la directora del CIEP también acota que esto no resuelve el problema fiscal que se vive en México. Otras medidas, señala, como “las deducciones, los estímulos fiscales, dejar de rescatar Pemex, que los que más tienen casas más caras paguen más o los impuestos verdes” pueden ayudar a lograr un mejor sistema. 

En este mismo sentido, Andrea Larios menciona que si bien no sería una medida que transforme por completo las finanzas públicas, sí irían el camino correcto, hacía un sistema más justo y de redistribución de la riqueza. 

“En esa función redistributiva es donde está la importancia de que los impuestos que se impongan se hagan de forma progresiva, y que correspondan a este principio de quien tiene más paga más”, refirió Larios.

“Para cerrar el círculo de la redistribución”, concluyó la investigadora de Fundar, debemos de “garantizar que eso que se recaude se oriente a ampliar el acceso a derechos humanos y derechos sociales”. 

Es decir, que los recursos se dirigieran a asuntos prioritarios como la salud, la educación, la protección ambiental y el Sistema Nacional de Cuidados.

Con información de Animal Político

También te podría gustar...