Abuso en planteles militares: soldados y cadetes sufren golpes y humillaciones en su formación
Julio Astorga y Montserrat Peralta
Los elementos de las instituciones militares de México sufren violencia física como parte de su formación castrense. Golpes y humillaciones son una constante que viven los soldados y cadetes, siendo parte de las escuelas y dependencias militares.
De acuerdo con videos y fotografías a los que tuvo acceso Latinus y que fueron grabados por los mismos militares, es posible conocer que en las escuelas militares de México están arraigados los abusos y la tortura física y psicológica.
En uno de esos videos, presentados este martes por Carlos Loret en Latinus se ve cómo los elementos son obligados a apoyar su peso corporal con la cabeza, en una posición conocida como “mortero”. Quienes lo han realizado, dicen que la posición es muy dolorosa, ya que incluso el castigo termina cuando llegan al desmayo.
Mientras permanecen en esa posición, los cadetes y soldados son golpeados con tablas o tubos en diversas partes del cuerpo, pero principalmente en la zona de los glúteos.
Otra de las torturas más comunes es “el vampiro”, en la que los soldados son colgados cabeza abajo por horas y, durante ese lapso, se les echa talco en la cara para que se les dificulte respirar.
En otro de los videos se muestra cómo un elemento está tirado en una regadera luego de una golpiza que habría sido realizada por sus compañeros de escuela. A esta práctica se le conoce como “la judicial”.
Esos abusos físicos no son parte de ningún entrenamiento en la formación militar, pero suceden comúnmente y, de acuerdo con miembros del ejército, todos en los planteles saben que se practican.
En algunas ocasiones son pruebas para mostrar valor y aguante, y en otras sirven como castigo por cometer alguna falta o simplemente son novatadas que son parte del ritual de las escuelas castrenses.
Diversos casos de castigos y abusos en planteles de la Secretaría de la Defensa Nacional aparecen en los miles de correos electrónicos hackeados por el colectivo Guacamaya.
Por ejemplo, en 2021, en el fuero militar se abrieron al menos ocho causas penales relacionadas con abusos de autoridad hacia elementos de la institución.
Uno de esos casos sucedió en Guerrero, en donde un sargento realizó “adiestramiento” golpeando en los glúteos a una soldado. También en ese estado otro sargento golpeó a dos elementos con una tabla.
Los registros del ejército también indican que en 2020, un sargento de infantería ordenó a cinco concursantes que entraran a un bunker y los sepultó con arena. El documento señala que en esa actividad, que no era parte de la educación militar, falleció un elemento.
Durante 2021, en el fuero militar se abrieron al menos ocho causas penales relacionadas con abusos de autoridades por golpes con tablas, así como otras actividades que ponen en peligro la integridad física de los soldados, las cuales no están dentro del programa de formación de los militares.