Unesco solicita a México información sobre hotel en la Reserva de Calakmul
Silke Grasreiner
La oficina de la Unesco en México reaccionó a la nota de Proceso del 11 de abril sobre el hotel que la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) está construyendo desde enero de 2023 en la Reserva de Calakmul, como parte de las obras del Tren Maya. Por medio de su portavoz en México, Juan Luis Montoya Acevez, la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco) aclaró que hasta ahora el gobierno mexicano no les había informado sobre la construcción del hotel, pese a que se encuentra en una zona declarada patrimonio de la humanidad por la Unesco.
En su respuesta a la publicación en Proceso del pasado jueves, la Unesco informó que buscará “aclarar el posicionamiento del Centro del Patrimonio Mundial de la Unesco (UNESCO World Heritage Centre) sobre el proyecto de construcción del hotel mencionado en el artículo”.
Textual, dice la respuesta de la organización dedicada a la defensa del patrimonio mundial:
“La UNESCO ha sido informada del proyecto de construcción de un nuevo hotel dentro de los límites de la propiedad Antigua Ciudad Maya y Bosques Tropicales Protegidos de Calakmul, Campeche, a través de los medios de comunicación, incluyendo su mensaje.
“Sin embargo, hasta la fecha, el Centro del Patrimonio Mundial no ha sido notificado por las autoridades mexicanas al respecto. De conformidad con el procedimiento previsto en las Prácticas Directrices de la Convención del Patrimonio Mundial, el Centro del Patrimonio Mundial de la UNESCO se está poniendo en contacto con las autoridades mexicanas para obtener información técnica precisa sobre este proyecto y su ejecución.
“Una vez recibida esta información, el Centro del Patrimonio Mundial procederá a un examen técnico para comprobar las posibles repercusiones de este proyecto en el Valor Universal Excepcional del sitio, es decir, en los elementos que justifican la inscripción del bien en la Lista del Patrimonio Mundial. La revisión se proporcionará posteriormente a las autoridades mexicanas, para orientar a las instituciones responsables de la conservación y gestión del sitio. Cualquier información pertinente que resulte de lo anterior será tomada en cuenta en el monitoreo del estado de conservación del bien que realiza el Comité del Patrimonio Mundial”.
El sitio arqueológico de Calakmul forma parte del Patrimonio Cultural de la Humanidad de la Unesco desde 2002. En 2014, a petición del gobierno mexicano, la Unesco agregó a la antigua ciudad maya los bosques tropicales protegidos que la rodean e incluyó toda la zona de la Reserva de Calakmul en su lista de Patrimonios Mixtos, Culturales y Naturales, de la Humanidad. Según su página web, la Unesco considera que “los sitios del Patrimonio Mundial pertenecen a todos los pueblos del planeta, independientemente del territorio en el que se encuentren”.
El estatus de Patrimonio Mixto de la Humanidad fue concedido a la Reserva de Calakmul cuando estaba vigente en México el decreto del 23 de mayo de 1989, en el cual el entonces presidente Carlos Salinas de Gortari había declarado la zona Área Natural Protegida, nombrándola Reserva de la Biósfera de Calakmul. Este decreto ubicaba el sitio arqueológico de Calakmul y la carretera hacia él en una amplia zona núcleo, “en donde las únicas actividades permitidas son la preservación de los ecosistemas y sus elementos, así como la investigación científica y educación ecológica”. No estaba permitido la construcción de un hotel ni otras actividades turísticas.
En violación a este decreto, en enero de 2023 la Sedena inició la construcción del hotel Tren Maya Calakmul dentro de esta zona núcleo, a escasos diez kilómetros del sitio arqueólogico de Calakmul, como informó Proceso en su edición mensual de diciembre pasado. (https://proceso.pressreader.com/proceso/20231201).
El gobierno mexicano cambió el decreto hasta nueve meses después, en septiembre de 2023, para otorgar el permiso de construir a posteriori, por medio de un cambio de la zonificación dentro de la Reserva. Además el gobierno intentó ocultar este importante cambio de la zonificación utilizando un mapa falso en el Diario Oficial de la Federación (DOF).
Con información de Proceso