Feliciano Castro encaró a los narcos de Culiacán
Álvaro Aragón Ayala
En medio de la violencia que obligó al gobierno federal a militarizar Culiacán, con un discurso dividido en dos vertientes, pronunciado en el Tercer Informe o de despedida de la LXIV Legislatura, el diputado de Morena Feliciano Castro Meléndrez encaró a los grupos los narcotraficantes que generan una crisis de seguridad en Sinaloa contra los que pidió “no permitir que nos roben la normalidad ni las calles ni los espacios púbicos”.
La perorata de Castro Meléndrez la lanzó en pleno fragor de la batalla a tiros que se libra en Culiacán, Elota, Cosalá, Navolato y El Dorado y a unas cuentas horas en las que un grupo armado “tiró” volantes en avionetas y drones en varias ciudades del Estado, papeletas en las que relevan extorsiones y negocios que achacan a la otra fracción delictiva, a la cual vinculan, también en el panfleto, al gobernador Rubén Rocha Moya y a Enrique Inzunza Cazarez, ex secretario general de Gobierno y Senador de la República.
En la primera sección de su discurso, el Legislador de Morena, todavía presidente de la Junta de Coordinación Política, expuso que “si en Sinaloa queremos la paz, debemos construir una gran alianza con los gobiernos estatal y federal; no debemos permitir que nos roben la normalidad ni las calles ni los espacios púbicos”. En su segunda parte, agregó que “tampoco debemos aceptar más mentiras y difamación en contra del gobernador Rubén Rocha Moya”.
La primera vertiente fue, pues, su posición de cara al fenómeno del narcotráfico y la segunda la dedicó a criticar a las fuerzas políticas del PRI, PAN y PAS y las acusó de estar atacando con mentiras y difamaciones al gobernador Rubén Rocha “sólo para acarrear agua a sus molinos”. No incluyó a los partidos Movimiento Ciudadano, Partido del Trabajo ni al Partido Verde Ecologista de México.
