¡Es la definición de Cuén! 

Alvaro Aragón Ayala 

En la relación política, con altibajos y rupturas, del gobernador Rubén Rocha Moya y Héctor Melesio Cuén Ojeda, destaca la definición del fundador del Partido Sinaloense por la candidatura a la presidencia de la República de Adán Augusto López Hernández, secretario de Gobernación. 

Si se aplica el razonamiento lógico a la disrupción del gobernador Rubén Rocha con el fundador del PAS se localiza como motivo de origen esa definición y el resurgimiento del Grupo Político del PRI que en el 2010 perdió la elección estatal, clan al que incomoda el activismo y el crecimiento de Cuén Ojeda.   

La fabricación de funcionarios estatales con perfiles panistas y priistas y la suma de traidores del PAS, el placeo con empresarios, los modos, gestos, actitudes, conductas, declaraciones, etc., o sea, lo externo, lo tangible, revelan la nueva ruta política de Rocha Moya.  

La integración del gabinete de Rubén Rocha y la conformación de parte de la estructura del futuro Consejo Político Estatal de Morena ofrece la lectura del resucitamiento del grupo priista que en el pasado reciente fue derrotado por Mario López Valdez, candidato de la alianza PAN-PRD-Convergencia, con el apoyo del exgobernador Juan S. Millán.  

El grupo político perdedor del PRI que bifurcó su apoyo en las elecciones federales del 2018 para no arriesgarse a una nueva derrota, ahora le apuesta a la candidatura presidencial de Marcelo Ebrard Casaubón, quien, en aquel año, visitó Sinaloa para pasar la “charola” a empresarios locales en apoyo a la candidatura de Andrés Manuel López Obrador. 

Ebrard Casaubón-2024 es la definición del grupo en el que en el 2010 se movía Rubén Rocha y que en el 2018 se convirtió en candidato de Morena al Senado de la República. Ese grupo es resucitado-activado-liderado por el gobernador con la asesoría de su secretario general de Gobierno, Enrique Inzunza Cázarez, Jesús Aguilar Padilla y Jesús Vizcarra Caderón.  

Dueño de un partido político y líder de cuenistas que participan en Morena, PRI y PAN y que simpatizan con su proyecto, Cuén Ojeda, quien se definió por Adán Augusto López Hernández, no se acopla, menos como uno del montón o como un subordinado, en el Grupo que en el 2010 perdió la gubernatura, y que resultó beneficiado con el triunfo de Morena-PAS en el 2021. 

La relación cívica-electoral-política que mantenían Rubén Rocha Moya y Cuén Ojeda se rompió por el pretexto de la presencia de una corriente cuenista en Morena y el reacomodo que realiza el gobernador para frenar a otra corriente, la de Malova y Gerardo Vargas, la cual pudiera crecer. 

El grupo Malova, mutado en Grupo Trébol, ahora de corte morenista, incomoda a quienes creen tener derecho de pernada con Marcelo Ebrard porque en el 2024 pudiera ser agraciados con posiciones políticas de mayor envergadura lo que le daría margen para salir del “encierro municipal” y disputar la gubernatura en el 2027.  

La colocación de personajes del PRI y del PAN en el gabinete estatal y la gracia que se les concede para que se muevan con soltura en los intestinos de Morena tiene como propósito controlar ese partido y cooptar, cerrarles las vías de acceso, evitar que sean incorporados al Proyecto Trébol o bien al Proyecto PAS-Cuén-Morena.  

En concreto: el rompimiento de Rocha con Cuén obedece a las definiciones políticas y al interés de “asustarlo” para que recule y deje de practicar política en tierra y en la cúpula del poder. El Grupo Político del PRI derrotado en el 2010 por Malova-Juan S. Millán está de regreso -junto al ganador de aquel año- y se juega su destino con Marcelo Ebrard. Es cuanto.  

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