Choque entre May y Adán Augusto aviva tensiones internas entre morenistas de Tabasco
Rodulfo Reyes
Los jaloneos y amenazas exhibieron hace dos semanas al líder del Senado, el exsecretario de Gobernación y exgobernador de Tabasco, Adán Augusto López Hernández. Ese talante lo ha confrontado con partidos y políticos opositores de Morena, pero también al interior de su propio partido y aun dentro del círculo cercano con el que el expresidente Andrés Manuel López Obrador apuntaló su movimiento desde esa entidad.
La violencia desatada en semanas recientes en Tabasco y los señalamientos que desde el gobierno de Javier May Rodríguez responsabilizan al grupo delictivo La Barredora y a funcionarios del sexenio anterior, reavivó la añeja confrontación entre dos grupos políticos de origen local hoy en Morena, pero que desde el perredismo y el priismo marcaron su distancia:
El que formó en esa entidad y encabeza el propio Adán Augusto, y el otro en el que participan el actual mandatario estatal Javier May, el director de Infonavit, Octavio Romero Oropeza, y el secretario de Gobierno, José Ramiro López Obrador, hermano del expresidente.
Sin ambages, José Ramiro se ha desmarcado desde hace años del actual líder morenista en el Senado tras una rivalidad política surgida desde las filas del PRD. En 2022 lo acusó de imponer a su sucesor en el gobierno del estado cuando fue llamado por el presidente a ser secretario de Gobernación.
Después de esto, tanto Pepín (como se le conoce al hermano del expresidente) como Javier May apoyaron abiertamente a Claudia Sheinbaum como candidata a la presidencia.
El miércoles 11 de diciembre último, la presidenta Sheinbaum atizó el enfrentamiento entre los grupos mencionados cuando salió en defensa del senador ante los señalamientos de Javier May de un supuesto pacto de la administración de Adán Augusto con el crimen organizado.
En la conferencia mañanera, Sheinbaum descartó tener información de que el exsecretario de Gobernación hubiera tenido ese tipo de acuerdos, y aseguró que tampoco creía que los hubiera hecho.
Sin embargo, cuando era responsable de la política interna del país, López Hernández tuvo conocimiento de documentos oficiales de la Defensa Nacional que involucraban al funcionario que él nombró con el crimen organizado.
El 5 de octubre de 2022, Proceso publicó: “Cuando era gobernador de Tabasco, el actual secretario de Gobernación, Adán Augusto López Hernández, entregó la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC) y la Policía Estatal a tres hombres que el Centro Regional de Fusión de Inteligencia (Cerfi) Sureste identificó como integrantes del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG). Se refirió incluso a uno de ellos como ‘supuesto líder’ del grupo en Tabasco: Hernán Bermúdez Requena, quien permanece al frente de la SSPC.
“Un informe del Cerfi Sureste señaló que al menos tres líderes huachicoleros de la zona hablaron, en conversaciones privadas, de las presuntas relaciones entre el delincuente Benjamín Mollinedo Montiel, el Pantera, y ‘el gobernador’ López Hernández. Mollinedo era, entonces, un ‘blanco prioritario’ de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), según el Cerfi, pues encabezaba la organización conocida como La Barredora (…)”.
Bermúdez, destituido tras balacera
El 26 de agosto de 2021, tras la salida de Adán Augusto del gobierno para ser secretario de Gobernación de AMLO, el mandatario interino de Tabasco, Carlos Merino Campos, ratificó a Bermúdez Requena al frente de la SSPC.
Bermúdez Requena fue destituido el 5 de enero de este año, ocho meses antes de la culminación del sexenio estatal, luego de que se registrara una balacera en su domicilio particular del exclusivo fraccionamiento Campestre de Tabasco 2000, en donde habrían estado presentes dos colaboradores del funcionario que presuntamente son capos locales.
La información del enfrentamiento, que dejó como saldo dos uniformados levantados, cuyas cabezas decapitadas fueron encontradas semanas después en la frontera con Chiapas, lo hizo público el general Víctor Hugo Chávez Martínez, quien fue nombrado en lugar de Bermúdez Requena y ratificado por Javier May en octubre pasado.
Bermúdez llegó a Tabasco durante el gobierno de Manuel Gurría Ordóñez (1992-1994), y desde entonces participa en el grupo de Adán López, quien llevó a las filas de Morena a sus allegados en 2018, al ganar la gubernatura de Tabasco.
El lunes 13 de marzo de 2023, con el proceso interno de Morena para definir la candidatura presidencial en plena efervescencia, May Rodríguez, a la sazón titular del Fondo Nacional de Turismo (Fonatur), se manifestó a favor de que Sheinbaum abanderara a su partido en las elecciones de 2024.
La adhesión del tabasqueño a favor de la entonces jefa del Gobierno de la Ciudad de México no hubiera tenido nada de espectacular y se habría circunscrito en el contexto de la cargada que empezaba a decantarse a favor de aquélla, pero el hecho de que su paisano Adán López, entonces secretario de Gobernación, participase en la contienda morenista le dio otro cariz a su postura.
En entrevista con la estación de radio XEVT, el entonces responsable del Tren Maya matizó que apoyaba a Claudia porque su paisano no tenía “presencia nacional”.
Insistente, su entrevistador le preguntó por qué apoyaba a Sheinbaum y no a su coterráneo.
“Porque yo creo que Claudia ha hecho un buen gobierno, gobernar la Ciudad de México no es fácil y lo ha hecho bien”, contestó.
Aunque el embate en contra de Adán Augusto por parte de los seguidores de la mandataria capitalina lo había empezado meses atrás José Ramiro López, quien fue el primero en descalificar al entonces responsable de la política interna del país con el argumento de que si no había podido con el gobierno de Tabasco menos podría con el gobierno de México.
Como el eslogan de precampaña de Adán Augusto era “que siga López”, o sea él después de Andrés Manuel López Obrador, sobre esto José Ramiro señaló públicamente que “hay de López a López”, además afirmó que López Hernández tenía a Tabasco como “su rancho” y que había impuesto al gobernador sustituto Carlos Manuel Merino Campos.
En agosto de 2021, el Congreso de Tabasco le concedió a López Hernández licencia por tiempo indefinido como titular del Ejecutivo local. Antes de irse como secretario de Gobernación, en sustitución de la exministra de la SCJN Olga Sánchez Cordero, operó para que en su lugar se quedara quien era coordinador de programas federales en el estado, su incondicional Carlos Merino, quien lo sustituyó también cuando se separó del cargo de diputado local y luego de senador.
El nuevo mandatario mantuvo al mismo equipo de gobierno, lo que fue visto en círculos políticos como una supeditación a Adán López.
Antes de que May se manifestara a favor de Sheinbaum y en contra de Adán López, ya se había dado un “adelanto” de lo enconadas que estaban las posiciones entre los seguidores de aquélla y del tabasqueño: el 23 de agosto de 2022 fueron despedidos más de 200 trabajadores del gobierno estatal, del Congreso local y de los ayuntamientos por hacer pública su adhesión a la causa de la mandataria capitalina.
Colaboradores cercanos a May circularon en grupos políticos locales que ese despido masivo fue la venganza de Adán López ante el pronunciamiento del grupo de los fundadores a favor de Sheinbaum.
Incluso una facción morenista, entre quienes estaba el académico Rodolfo Lara Laguna, quien fue maestro del expresidente López Obrador, acusó a López Hernández de ser el responsable del despido injustificado.
El tema escaló a la Ciudad de México, en donde Claudia Sheinbaum se manifestó en contra de la actitud del grupo de López Hernández de correr a sus seguidores. Algunos de éstos obtuvieron posiciones en la actual administración estatal.
Éste fue el caso de Sheila Cadena, quien fungió como secretaria de Desarrollo Energético con Adán Augusto como gobernador y fue despedida cuando se sumó a la precandidatura de Sheinbaum. Al asumir el cargo May, éste la designó titular de la Secretaría de Medio Ambiente y Desarrollo Sustentable dentro de su gabinete.
A pesar de la intervención de quien a la postre sería presidenta de México, la administración controlada por el entonces titular de Gobernación no reculó y mantuvo la decisión de dejar fuera a más de 200 empleados del gobierno estatal por no estar en su proyecto político.
Una antigua enemistad
Las diferencias entre los grupos tabasqueños vinculados al expresidente López Obrador vienen de mucho tiempo atrás, cuando Adán Augusto López y Javier May eran cuadros importantes del PRD bajo la égida de López Obrador.
El 9 de mayo de 2002, el poeta chontal Auldárico Hernández Gerónimo solicitó licencia como diputado federal del PRD para contender por la presidencia estatal de su partido, en un procedimiento interno en el que compitió con José Ramiro López Obrador.
En un proceso dominado por las denuncias de irregularidades, Auldárico le ganó la consulta a las bases a José Ramiro, en la misma elección en la que Rosario Robles Berlanga resultó electa como presidenta nacional del sol azteca.
A Hernández Gerónimo lo apoyó una corriente de perredistas en la que participaban Adán Augusto López y el excandidato a la gubernatura Raúl Ojeda Zubieta, mientras que al hermano de AMLO lo respaldó el grupo de los fundadores del movimiento, capitaneado por Octavio Romero Oropeza y Javier May.
A partir de entonces, la corriente priista de lo que ahora es Morena se mantuvo en desacuerdo con el ala de los radicales, que tienen en su trayectoria nunca haber militado en el PRI.
Auldárico Hernández fue dirigente del PRD lopezobradorista de 2002 a 2006, pero a partir de entonces fue marginado del grupo más compacto alrededor de AMLO, como si éste no le hubiera perdonado haber derrotado a Pepín.
Como prueba del choque irreconciliable entre ambos grupos, cuando López Hernández era precandidato presidencial se comentaba en Tabasco que en caso de no lograr la nominación del partido, como premio de consolación lo iban a dejar poner al próximo gobernador.
“Si no es Adán el candidato (a la Presidencia), cualquiera puede ser el abanderado a (la gubernatura de) Tabasco, menos Javier May”, fueron versiones manejadas desde el equipo de López Hernández.
Por esas fechas se daba como un hecho que si Adán Augusto se quedaba en el camino, su hermana Rosalinda sería la elegida para despachar en el Palacio de Gobierno de la Plaza de Armas en Villahermosa.
Pero al final no se cumplió el pronóstico; después de haber quedado en cuarto lugar en las encuestas para elegir a la carta presidencial y tras un periodo en que parecía no estar de acuerdo con ese resultado, López Hernández resurgió para ser nombrado líder del Senado. Rosalinda falleció el 5 de junio pasado, sin poder asumir la senaduría en la que también fue postulada por Morena.
Javier May, a su vez, fue nombrado candidato a gobernador sin oposición interna. Aunque la corriente adancista se distanció de él, el 2 de junio de este año ganó la elección con el 80% de los votos, convirtiéndose en el candidato a la gubernatura de Tabasco más votado en toda la historia.
Durante las campañas, enemistado con Adán Augusto, en varios discursos proselitistas May prometió que los tabasqueños “nunca más volverán a estar olvidados por sus autoridades”, en referencia a que López Hernández se distanció de la población luego de ganar las elecciones de 2018.
El pasado 13 de noviembre otra vez asomó la enemistad entre el senador y el mandatario, cuando May pidió a las autoridades que le antecedieron explicar si tuvieron nexos con la delincuencia organizada.
Y fue más allá al acusar a Hernán Bermúdez Requena, quien fuera nombrado secretario de Seguridad y Protección Ciudadana de Tabasco por López Hernández, de “comandar” a La Barredora, un grupo delictivo local al que se responsabiliza de la violencia que azota al estado desde el 1 de octubre, fecha en que arrancó su sexenio.
En una rueda de prensa, el mandatario soltó: “Con nosotros no hay ninguna relación, ni un encuentro con este tipo de cárteles; todos saben, aquí era vox populi quién comandaba La Barredora. ¿O no sabemos?”, expuso.
Cuando un reportero pronunció el nombre de Bermúdez, a quien informes de inteligencia militar jaqueados por Guacamaya Leaks ubican como el “Comandante H”, May respondió que sí.
En esa misma conferencia de prensa, el mandatario también subrayó su distancia con la forma de comunicar del gobierno de Adán López, al asegurar que su gestión no sólo le daría información a un medio informativo.
Y es que López Hernández nada más recurrió a una estación de radio que obtenía todas las notas exclusivas de la esfera gubernamental, y en la que, al principio de su gestión, el ahora líder del Senado ofrecía una entrevista mensual, a manera de mañanera.
May da una conferencia de prensa tres veces por semana, para cuyo ingreso no hay restricciones.
Con información de Proceso