Engañoso que AMLO busque eliminar ‘pluris’; su reforma plantea elegir diputados por lista

Samedi Aguirre

Según el presidente Andrés Manuel López Obrador, con su propuesta de reforma se reducirá el gasto electoral, entre otras razones —afirma—, porque “ya no habrá diputados ni senadores plurinominales”. 

“Cuánto nos ahorramos si ya no hay senadores ni diputados plurinominales y en vez de 500 diputados hay 300. Solo los que elija el pueblo”, dijo en la mañanera de este jueves 3 de noviembre. 

En actos públicos previos, ya ha repetido ese argumento.

Pero aunque su proyecto sí contempla que haya 200 diputados menos —mismo número de curules que hoy ocupan los plurinominales—, este no elimina la selección por medio del principio de representación proporcional. Es decir, aquellos legisladores que llegan a ocupar un lugar legislativo sin haber sido votados de forma directa. 

De hecho, su iniciativa tiene como base este esquema de ‘pluris’, con el que candidatos y candidatas pueden obtener una curul al aparecer en listas predefinidas por los partidos, aunque la ciudadanía no haya votado directamente por ellos. 

Lo que sí se eliminaría son los legisladores uninominales o de mayoría relativa, aquellos por los que actualmente la ciudadanía vota de forma directa. 

Pamela San Martín, exconsejera del INE, explicó a Animal Político: “Lo que se elimina en sí mismo son el número de escaños. Pero la forma de elección ahora va a ser por lista, es decir: los partidos presentan una lista, yo voto por el partido y digamos que se distribuye entre los partidos los escaños a partir del número de votos recibidos. Pasamos de un sistema mixto a uno completo de pluris”. 

La maestra Jessika Velázquez Torres, especialista en el sistema electoral, menciona que lo que se plantea podría considerarse una simulación de representación proporcional, que no beneficiará a las minorías. 

“Lo que se busca es quitar a los uninominales. O sea, al quitar las circunscripciones y dejar la figura de la mayoría relativa, esto significa que los plurinominales serán lo que se quede”, señala. 

El análisis “Implicaciones de la reforma electoral”, realizado por la empresa consultora Integralia, señala que con este cambio se “se mejora marginalmente la proporcionalidad de la Cámara de Diputados”. 

Sin embargo, “se partidiza el sistema representativo al romper el vínculo entre el legislador y elector, ya que todos los legisladores se elegirán por lista y ninguno por forma directa”.

Proponen listas estatales 

En el actual sistema electoral mexicano hay 500 diputados. En las urnas, las personas votan directamente por 300, uno por cada distrito electoral. 

Los otros 200 llegan por el principio de representación proporcional, que significa que se asignan de forma proporcional al número de votos que obtuvo su partido durante la contienda. 

Entre más votos obtuvo un partido más lugares gana. Y esos lugares se van asignando en el orden que aparecen en una lista previamente elaborada por cada partido y aprobada por el INE. 

Para el caso de la Cámara de Diputados, cada partido integra cinco listas, una por cada circunscripción electoral en las que actualmente se divide el país.

Este mismo principio aplica para la actual elección de senadores; en este caso, hay 128 en total, y 32 de ellos obtienen su lugar por representación proporcional. 

En este caso, los plurinominales del Senado surgen de una lista nacional que integra cada partido.

La reforma del presidente López Obrador plantea reducir de 500 a 300 los integrantes de la Cámara de Diputados y de 128 a 96 los integrantes del Senado.

También propone eliminar el sistema de distritos y circunscripciones electorales, y que ahora los candidatos y candidatas a la Cámara baja sean propuestos y electos por cada entidad federativa mediante listas, mientras que el número de diputados asignados sería de acuerdo a la población de cada entidad. 

Es así que entre más población tenga un estado, más legisladores tendrá en la Cámara. 

Por ejemplo, el Estado de México aportaría 40 diputados; la Ciudad de México, 22; Jalisco, 20, y Veracruz, 19; mientras que Baja California Sur, Campeche y Colima aportarían solamente dos diputados cada uno.

Y de forma similar a como ocurre con los plurinominales actualmente, los curules se asignarían en función de la votación obtenida. 

“A cada partido político y lista de candidaturas independientes le será asignado el número de diputaciones que le corresponda, de acuerdo con su votación obtenida en cada entidad federativa”, señala la iniciativa. 

“A efecto de obtener el cociente natural de asignación, se dividirá la votación válida de la entidad federativa entre el número total de diputaciones por asignar (…) Todo partido político o lista de candidaturas independientes que alcance por lo menos el tres por ciento del total de la votación válida en la entidad federativa tendrá derecho a que le sean asignadas tantas curules como cocientes naturales enteros contenga su votación”. 

“En la asignación se seguirá el orden que tuvieren las candidaturas en la lista correspondiente”, 

En palabras de Pamela San Martín, esto significa que “lo que sí se cambia es cómo se determinan las circunscripciones, es decir, los ámbitos por los que yo voto. En la reforma lo que se propone es pasar a listas estatales, es decir, cada estado va a tener una propia lista”.

Dudas en la representatividad

Ambas especialistas señalan que la figura de la representación proporcional precisamente fue creada para tratar de equilibrar las fuerzas políticas y no dejar fuera a ninguna minoría, pues la democracia lo que busca es la representación de los intereses de los votantes.

“Lo que hace el principio de representación proporcional actualmente es permitir que estas minorías, a través de estas cinco circunscripciones, que son equitativas en población, puedan ser representadas a través del principio de representación proporcional”, señala Velázquez. 

Sin embargo, si nos pasamos a que cada entidad de la República emita sus listas, “nos vamos a encontrar con un escenario en que los partidos políticos más sólidos son quienes van a recibir la mayoría de esta votación, y vamos a dejar inadvertidos a esta minoría, que actualmente es garantizada, es vista, es legitimada y tiene representatividad a través del principio de representación proporcional”. 

Pamela San Martín indica que cuando hay una mejor representación es cuando el número de votos emitidos por un partido tiene la mayor similitud al número de escaños en el Congreso.

“Por ejemplo, proporcionalmente si yo recibí el 30% de los votos del país yo debería tener 30% de la cámara. Estamos en representación pura”, explica.

Ahora, agrega, lo que se tiene que calcular es el impacto que esto puede tener en la representación de las minorías.

Pero, además, advierte que esta nueva fórmula no sólo resta diputados, sino también certeza. Con la eliminación de las circunscripciones también se eliminan los órganos distritales, que son las estructuras profesionales dedicadas a la organización de las elecciones, para  pasar de una estructura permanente a órganos auxiliares y temporales sin profesionalización ni certeza. 

En el Congreso, además de la iniciativa del presidente, se discuten otras propuestas de reforma electoral. El actual periodo de sesiones concluye a más tardar el próximo 15 de diciembre. 

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