La esencia de “La Semanera”…
Álvaro Aragón Ayala
El formato de comunicación gubernamental y política “La Semanera” de Rubén Rocha Moya es, por fortuna, generadora de opiniones encontradas, de análisis y contra-análisis y de réplicas y contra-réplicas; es un ejercicio que nutre la praxis de la democracia y abre los cauces para el debate periodístico-gubernamental en el marco del derecho al saber y de la libertad de expresión.
“La Semanera” cumplió un año el 8 de noviembre. Todos los lunes concentra el ánimo de los sinaloenses por los sucesos que ahí se tratan al desnudo y la posición que marca el gobernador en torno a los trabajos periodísticos publicados o difundidos, con cuyo contenido discrepa, levantando en ocasiones el enojo de quienes se creen aún dueños de la verdad y que argumentan que se atenta contra la libertad de expresión.
No es así ya que la libertad de expresión es una correa de ida y vuelta; un cruce de opiniones y posiciones… Es natural que en los regímenes democráticos, políticos-comunicadores-gobierno polemicen sobre el quehacer gubernamental y sobre la agenda socio-económica y política que impacta a los colectivos ciudadanos y que necesariamente se colocan en la mesa de la discusión pública.
El diseño de “La Semanera” no es de corte dictatorial porque deja abierto los canales para que politólogos, políticos, periodistas y analistas, valoren el contenido de las declaraciones de Rubén Rocha Moya, y planteen sus puntos de vista o hagan uso de su derecho de réplica y contra-réplica cuando se sientan afectados, derecho que también ejerce el gobernador cuando él considera que una declaración o información daña la imagen de su gobierno.
“La Semanera” nació en el arranque del proceso de la Cuarta Transformación en Sinaloa; cuando el derecho al saber, elevado a derecho humano, ha adquirido un papel central en la sociedad y cuando, hoy más que nunca, se discuten los alcances del derecho de acceso a la información y sus efectos prácticos en una sociedad atenta y conocedora de los acontecimientos.
En el cumplimiento al derecho a saber de la sociedad radica la esencia de “La Semanera” ya que es un ejercicio de comunicación que mejora la calidad de la rendición de cuentas, facilitando a los periodistas, politólogos y analistas y a la sociedad interesada, el examen de las acciones del gobierno a partir de declaraciones, lo que posibilita el contraste y enriquecimiento del debate sobre las políticas públicas y los resultados obtenidos.
El ejercicio de comunicación política-gubernamental de Rocha Moya debe continuar y perfeccionarse. “La Semanera” aporta el valor agregado para entender que los dueños de la verdad no existen y de que el ejercicio del periodismo no se constriñe a informar u opinar sin efecto -a cada acción corresponde una reacción-; que es también libertad de expresión, de ida y vuelta, que es metaperiodismo, y el ajuste puntual del derecho a la réplica o la contra-réplica.