El gobierno fallido de Rubén Rocha y Julio Berdegué Sacristán
Antonio Quevedo Susunaga
El día de ayer, entre los nombramientos dados a conocer por la doctora Claudia Sheinbaum, presidenta electa de México, anunció como secretario de agricultura, al mazatleco Julio Berdegué Sacristán, que tiene una tarea muy importante atender el problema del agua en el país, revisar las concesiones a cerveceros y refresqueros, crear el plan hídrico nacional, no permitir la entrada del maíz transgénico e impedir el uso de glifosato.
El nombre de Julio Berdegué no lo debe usted olvidar, es un experto en agricultura, que entró ayer por la puerta grande de México.
El más preocupado, desde ayer, debe ser el gobernador Rubén Rocha Moya, un gobernador de la izquierda fracasado en Sinaloa, debe dejar de organizar sus grillas, con sus golpeadores, gente que no conocen ni Sinaloa.
La doctora Claudia Sheinbaum, seguramente está pensando en los agricultores de Sinaloa, pero también en un gobierno fallido como el de Rocha y seguramente Julio Berdegué es una carta que seguramente preparará Claudia durante estos tres años.
Los pleitos de Rocha contra Guillermo Benítez, para impedir que su figura creciera y le pudiera disputar el poder político. El otro garroteado fue el expresidente municipal de Culiacán, Jesús Estrada Ferreiro y finalmente después de traicionar a Héctor Melesio Cuén, lo ha perseguido para evitar que sea el próximo candidato a la gubernatura de Sinaloa.
En esa actitud enfermiza de Rocha de pelear con “locura política”, el control de Sinaloa, veremos cómo tomará un personaje que le empalma la doctora Sheinbaum a la figura del gobernador de Sinaloa.
La mayor preocupación de Claudia Sheinbaum debe ser, con la información que tiene del gobierno de Rocha, es tener un gobernador de esta estatura, busca pleito, perseguidor político y que entra en descontrol con mucha facilidad, a niveles de trastorno preocupante.
Hasta el momento los pleitos de Rocha están encaminados para controlar el poder de Sinaloa, con su gente como Enrique Inzunza, con Tere Guerra, Imelda Castro, entre otros mediocres que integran su gabinete.
Desde ayer estamos viendo nacer un posible sucesor de Rocha Moya, Julio Berdegué, nuevo titular de agricultura de México, cargo que lo ubica con un enlace natural con Sinaloa, en donde están los productores agrícolas más importantes del país, que repudian.
El gobernador no debe olvidar que él llegó con el voto del presidente Andrés Manuel López Obrador, que le cumplió a Sinaloa con el plan hídrico de las presas Santa María y la Picachos, haciendo a un lado el mérito que pudo capitalizar el gobernador de Sinaloa.
Ahora la que manda en Morena, es Claudia Sheinbaum, y si tiene alguna duda que le pregunte a los 36 millones de mexicanos que le dieron el voto que incluye, todo el poder.
Es indiscutible que Berdegué es el principal funcionario que vendrá a Sinaloa, para hablar del tema de las siembras de maíz, frijol y otros productos, como también vendrá a ordenar el uso de agua agrícola, como lo han anunciado.
Berdegué es licenciado en Ciencias de la Agricultura por la Universidad de Arizona; tiene maestría en Agronomía por la Universidad de California; es doctor en Ciencias Sociales por la Universidad de Wageningen, Holanda y candidato a doctor por la Universidad de California.
Es indiscutible, que en estos tres años, lo menos que debe hacer Rocha Moya es poner en orden en su administración, parar la persecución, los ataques a los productores, a la Universidad Autónoma de Sinaloa y a los universitarios.
Y lo menos que puede hacer es correr a la fiscal, reformar su poder judicial y terminar con tanta improvisación.
