Los retos para las organizaciones en el segundo semestre de 2023
Gerardo García Rojas
A finales del 2022 y principios del 2023, las organizaciones se enfrentaron a retos y decisiones muy importantes. A modo de recap, las empresas dieron incrementos salariales en un escenario en el que había muchos cuestionamientos e incógnitas ligadas a las altas inflaciones que estaba experimentando el país.
Del mismo modo, nos enfrentamos a dudas como ¿hacia dónde vamos? El contexto internacional era un mundo post pandemia y dentro de los principales retos a nivel global surgió la pregunta de cómo tenían que “navegar” las corporaciones para surcar todos los obstáculos venideros, como los temas derivados del petróleo, la guerra entre Rusia y Ucrania, el alza de precios, etc.
Sin embargo, pese a todas las incertidumbres que tenía el mundo laboral, ya han transcurrido siete meses del 2023 y cada vez obtenemos más respuestas, pero el camino continúa. Uno de los cuestionamientos que resonó en este primer semestre estuvieron ligados al rediseño del lugar de trabajo, es decir ¿todos los colaboradores regresarían a los centros laborales? ¿No? ¿Podemos aplicar un esquema flexible y de ser así, qué sucede y cómo trabajo con la cultura organizacional? ¿Dónde queda el “corazón” de las compañías?
Adicionalmente, las firmas comenzaron a repensar los paquetes de compensación total que les permitiera atraer y retener al talento que necesitan, aunado al “nuevo ingrediente”: la flexibilidad. Otro aspecto que observamos estos meses fue el gap que existe entre las habilidades que necesitamos en nuestras organizaciones dadas las nuevas tecnologías y todo el contexto actual, para poder generar resultados vs lo que hoy en día tenemos.
Un informe publicado por el Foro Económico Mundial, a inicios de este año, mencionaba que se van a perder de aquí al 2025 alrededor de 80 millones de puestos de trabajo; sin embargo, se van a crear 90 millones de nuevos puestos, los cuales demandan muchos skills que hoy en día todavía no tenemos.
Un ejemplo muy sencillo fue la aparición de herramientas como Chat GPT, que obtuvo 10 millones de adoptadores de la aplicación en 24 horas, eso nos indica que vamos hacia allá, nos acercamos cada vez más a las nuevas tecnologías y eso, sin duda, viene a transformar la manera en la cual hoy en día podemos hacer las cosas.
¿Qué sigue el resto del año? Ciertamente, una pregunta que a muchos les estará resonando. El principal reto que van a tener las corporaciones es de qué manera realmente logran atraer y retener al empleado. El mundo nos exige que se consideren puntos como: diversidad, equidad e inclusión, ESG, salario digno, salud financiera, bienestar integral, etc. Lo anterior representa un desafío en el cómo construir una propuesta de valor sólida para los colaboradores, que evidentemente saben qué es lo que necesitan.
Las tendencias nos dicen que, si no logramos tomar todos estos elementos, ponerlos en práctica y cambiar la experiencia de nuestros empleados en este journey desde que entran hasta que salen de la organización, nos vamos a enfrentar a más dificultades en los siguientes años.
Hoy la propuesta de valor requiere cosas distintas, pero es importante que las empresas consideren todas las herramientas que tienen a su disposición para poder estar lo más preparados ante los cambios venideros.
Como reflexión los invito a pensar de qué manera están implementando los HR Data Analytics, ¿los están utilizando? ¿Los conocen realmente? ¿Qué les indican? Hoy por hoy la tecnología nos brinda una oportunidad que no podemos desaprovechar y pese a que no se pueden “predecir” comportamientos, sí tenemos la opción de estar preparados.
Es importante recordar que el departamento de Recursos Humanos no es distinto a los del área de producción o a cualquier otro y la digitalización es algo que deben estar considerando desde ya, si no se quieren quedar atrás y perder al mejor talento.